Los afectados por la comercialización de participaciones preferentes por parte de las entidades bancarias están saliendo estos días a las calles de forma masiva, para protestar contra este flagrante abuso de la Banca –otro más-, en diversas ciudades españolas.
Convocados por ADICAE, los consumidores se manifestaron frente a las sedes de La Caixa, Novagalicia Banco, BBVA o la CAM. De esta manera, miles de afectados salieron a la calle en Madrid, Barcelona, Alicante, Zaragoza, Vigo, La Coruña o Santiago de Compostela, en unas acciones reivindicativas que se seguirán repitiendo hasta que las entidades pongan fin al corralito en el que han encerrado los ahorros de decenas de miles de consumidores.
Las entidades no informaron adecuadamente
En las últimas semanas, ADICAE ha destapado el escándalo de la venta de participaciones preferentes y otros productos perpetuos por La Caixa, CAM, CAIXA GALICIA y otras entidades financieras y no financieras en nuestro país.
En la mayoría de los casos, se han detectado numerosos fraudes al ahorrador: falta de información o defecto de la misma en la comercialización del producto, falta de adecuación entre el tipo de producto y el perfil del ahorrador y su historial de inversiones, cláusulas abusivas en el contrato, etc.
Los ahorradores, como consecuencia de esta falta de información, han comprobado ahora lo que verdaderamente habían contratado años atrás, cuando durante estos meses han querido recuperar el dinero invertido y han recibido la negativa por parte de su entidad bancaria. Los afectados se han hartado de esta situación y, por eso, han decidido tomar las calles nuevamente.
Concentraciones pacíficas… e histerismo de la Banca
Con lemas como ‘este banco ve pasar la crisis desde un sitio preferente’, ‘cuidado, el corralito ha empezado ya’, ‘nosotros sólo queríamos un depósito sin riesgo’, ‘confiamos en vosotros y ahora nos falláis’, ‘mi vejez condenada por La Caixa’ o, simplemente, ‘ladrones’, miles de ciudadanos protestaron frente a las entidades financieras, que seguirán sintiendo el aliento de la ciudadanía.
Y lo seguirán sintiendo muy a pesar suyo, ya que quedó demostrado que van a intentar hacer todo lo posible para evitar estas protestas ciudadanas. Por ejemplo, en Madrid, la concentración se desarrolló bajo un fuerte despliegue policial ordenado por La Caixa. Y en La Coruña Novagalicia Banco decidió, ridículamente, desplegar a la Policía, pidiendo el auxilio de una veintena de agentes… ante el ‘empuje’ y la actitud ‘hostil’ de los manifestantes, conformados por un público claramente familiar.
Es del todo punto lamentable y ridículo que la Banca no se contente ya únicamente con abusar de los consumidores sino que, además, histéricamente, trate de impedir por todos los medios estas protestas ciudadanas, del todo punto pacíficas y sanas.
