Como si el endeudamiento de las familias fuese una buena noticia económica, el Banco de España ha hecho público un documento en el que se descubre que la deuda hipotecaria alcanzó durante el mes de junio los 684.922 millones de euros, un incremento global del 1’4% con respecto a junio de 2009, cuando su índice de crecimiento era del 1’1% según datos facilitados por el Banco de España.
La estadística demuestra que los préstamos de los hogares para la adquisición de una vivienda han comenzado a recuperarse, aunque experimentan una leve caída si se comparan con los datos de 2009.
Es preciso señalar que se trata de unas cifras que sólo benefician a la Banca y que el Banco de España continúa sin pedir responsabilidades a las entidades financieras por las elevadas tasaciones que bancos y cajas de ahorros realizaron en la época del ‘boom inmobiliario’ y que están pagando muchas familias en forma de injustos embargos.
El máximo organismo rector del mercado bancario español tampoco ha dicho una palabra sobre cómo se están concediendo estos préstamos hipotecarios: diferenciales excesivamente altos, excesos de petición de garantías por parte de la Banca, exagerada obligación de vincular productos a la hipoteca -domiciliar nómina, recibos, tarjetas de crédito, seguros de hogar y de vida, de pagos o de desempleo, fondos de inversión, planes de pensiones,….- ni sobre otros muchos abusos que las entidades financieras siguen imponiendo a los consumidores en sus hipotecas. Seguiremos peleando para que cumpla con su deber.
