Con la llegada del periodo estival se multiplican los abusos que lastran los derechos de los consumidores. Los últimos casos en sumarse a esta lista negra son la subida del IVA y los regalos promocionales por la victoria de la selección española en el Mundial de Sudáfrica que algunas firmas, como Toshiba, se niegan ahora a hacer efectivos.
ADICAE está atendiendo en sus servicios de orientación al consumidor distribuídos por 15 provincias españolas una media de 100 reclamaciones y consultas semanales por irregularidades en la aplicación de la subida del IVA y, desde la seguda semana de julio de 2010, incumplimientos o irregularidades en las promesas promocionales realizadas por multitud de empresas en torno a la victoria de ‘La Roja’ en el Mundial.
La aplicación de la subida del IVA: legal pero abusiva e injusta
Tras la aprobación de la subida del IVA, los consumidores se han encontrado con una desagradable sorpresa en sus facturas más habituales: gas, electricidad, agua y otros servicios corrientes similares han sido facturados con el nuevo IVA a pesar de corresponder a un consumo de meses anteriores.
Aprobada en septiembre del año pasado, la anunciada subida del IVA entró en vigor este mes de julio a pesar de la fuerte oposición social y política. Se trata de un impuesto que grava el valor añadido en toda la cadena de producción y que acaba pagando el consumidor. En España hay tres tipos diferentes: sobre los bienes y servicios de primera necesidad o superreducido, reducido y general. El Gobierno ha aplicado la subida a los dos últimos, que han pasado del 7 al 8% el reducido y del 16 al 18% el general. De esta manera el Ejecutivo espera recaudar más de 5.150 millones de euros antes de 2012. El consumidor se enfrenta, por tanto, a una subida de recibos mensuales básicos para todas las economías familiares: teléfono, luz, energía, limpieza, cesta de la compra,… Y es que el IVA afecta a los consumidores con rentas altas y bajas.
¿Qué dice la ley al respecto?
Por desgracia la ley es clara y ampara el abuso. Las facturas deberán aplicar el IVA vigente en el momento en el que se emitan. El beneficiario de toda esta operativa son las arcas de Hacienda que verán incrementada sustancialmente su recaudación desde este momento.
¿Había alguna otra solución más favorable al consumidor?
En este sentido es preciso denunciar que el Gobierno, una vez más, no ha tenido en cuenta a los consumidores. A las grandes compañías no les hubiera resultado especialmente complejo “fraccionar” sus facturas por periodos y emitir el IVA correspondiente, ahorrando así cientos de euros a cada familia en época de crisis.
Desde ADICAE siempre hemos defendido que el Gobierno debería haber informado convenientemente a los consumidores. Lamentablemente no lo ha hecho ni el Ejecutivo ni las empresas que, en especial las más grandes, no se han preocupado por realizar campaña explicativa alguna informando al consumidor de los efectos de la subida. Han preferido, por el contrario, enrocarse y hacer frente a una avalancha de reclamaciones.
¿Puede haber algún otro tipo de abuso?
En este ámbito entra en juego la picaresca de muchos empresarios sin escrúpulos, que podrían cambiar intencionadamente la fecha de facturación para acogerse de forma intencionada a la subida del IVA. Si por ejemplo, en una reforma del hogar, la empresa compró unos materiales antes de la subida del IVA y le factura al cliente con fecha posterior, se estaría beneficiando él de la diferencia en la facturación.
Por ello el consumidor debe permanecer alerta y, antes de firmar el documento, leer bien todo el contenido del mismo y asegurarse de que la fecha de facturación corresponde, realmente, a cuando se llevó a cabo el servicio o se efectuó la compra en cuestión.
Alerta con las rebajas y las ofertas vacacionales
ADICAE también considera preciso señalar que, en época veraniega, hay que tener mucho cuidado con las ofertas de paquetes vacacionales de determinadas agencias de viajes y, también, con los precios de las habituales rebajas.
En el caso de las rebajas se están dando casos que generan confusión en cuanto a los precios y promociones puesto que, en determinados etiquetados, se confunden el precio antiguo con la rebaja y la subida del IVA. Es preciso que la etiqueta deje claro a qué corresponde cada precio.
En cuanto a las agencias de viajes, la gran mayoría tienen en sus páginas web buscadores a través de los cuales el usuario introduce su destino y fecha de viaje. La agencia debe responder de la fiabilidad de los datos sobre los establecimientos hoteleros que se encuentran en su base de datos ya que si el establecimiento en cuestión no cumple con las expectativas creadas el consumidor puede reclamar. Para ello es conveniente tener a mano el teléfono de la agencia de viajes durante las vacaciones. En este sentido es necesario recordar que la publicidad tiene valor contractual, por lo que la agencia debe cumplir con lo pactado, y que el consumidor puede solicitar la cesación o rectificación de una publicidad ilícita.
Ante cualquier duda o irregularidad que el consumidor detecte en su facturación es preciso reclamar a través de asociaciones de consumidores como ADICAE o, directamente, a organismos de consumo.
