La asociación de consumidores ADICAE ha presentado este miércoles al Banco de España una petición al supervisor para exigir un marco de comisiones bancarias justas y proporcionadas ante su incremento abusivo y generalizado por parte de las entidades financieras. También se ha trasladado esta petición al ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos.
Así, un consumidor (análisis: https://goo.gl/bDpk8X) paga casi 400 € al año entre las diferentes comisiones, 80 € más que hace un año. Los datos acreditan las razones para la movilización y reacción de los consumidores, convocados por ADICAE para revindicar sus derechos durante el Mes del Consumidor, una batería de más de 200 actividades por toda España en torno al día 15, Día Mundial de los Derechos del Consumidor.
Los socios de ADICAE y consumidores activos presentes en el Banco de España este miércoles han firmado su adhesión a la petición por unas comisiones justas, igual que podrán hacer todos los ciudadanos en las sedes y la web de ADICAE.
En dicha petición, dirigida al gobernador del Banco de España, ADICAE exige la aplicación de unos criterios básicos, como la proporcionalidad; la regresividad (que quien menos ahorros tenga pague comisiones más reducidas); que el aumento de comisiones nunca suponga un incremento superior a una referencia fijada (como el IPC anual o una medida macro similar); evitar prácticas colusorias en materia de competencia y efectos ‘arrastre’; o mecanismos que eviten que las comisiones sirvan para enmascarar problemas de balance (la gran banca ya gana cerca de 20.000 millones por este concepto, la tercera parte de todos sus ingresos).
ADICAE advierte del riesgo contra la competencia y el efecto en el consumidor tras detectar similitud de costes en las entidades analizadas.
Se enlaza anexo ‘Ejemplos de comisiones absurdas y abusivas’ (https://goo.gl/5XxEPc), que recopila casos reales de prácticas habituales y otras nuevas que están aplicando los bancos.
Para la vicepresidenta de AICAR- ADICAE, Ana Solanas, la banca “está expulsando a muchos clientes a base de comisiones”, ya que “quienes pagan más comisiones son quienes tienen menos ahorros y, por lo tanto, menos vinculación con la entidad”, algo que “debería ser al revés”, por lo que ha pedido la intervención del Banco de España.
Solanas ha indicado que todos los consumidores deben reclamar todas aquellas comisiones que consideren abusivas e injustas, “para lo que pueden utilizar la aplicación gratuita http://reclama.adicae.net”, ha explicado. “Solo unidos conseguiremos acabar con la piratería bancaria en forma de comisiones abusivas”, ha enfatizado.
Comisiones más caras
Según ha comprobado ADICAE, la gran banca ha encarecido las principales comisiones en unos 40 euros de media (40,75) desde 2012. Las que más han subido son las que afectan justamente a la mayoría de los usuarios, como el mantenimiento de la cuenta (+26,37 €), el mantenimiento de la tarjeta de débito (+4,8 €) o el descubierto en cuenta (+4,9 €). Entre esta última penalización, que ronda los 15 euros, y la reclamación del descubierto, que supone unos 35, el consumidor puede verse obligado a pagar unos 50 euros por un descubierto de 1 euro durante unas horas, lo que ejemplifica la desproporcionalidad de estas condiciones impuestas.
La banca ha lanzado agresivas campañas de captación bajo el señuelo de ‘cero comisiones’, condicionadas siempre a que el cliente reúna distintos requisitos, como domiciliar su nómina, paro o pensión, contratar nuevos seguros o hacer altos gastos con las tarjetas. Esta fuerte vinculación resta libertad y poder de negociación al consumidor. Así, el ciudadano es víctima de un encarecimiento generalizado de las comisiones más habituales y la imposición de otras nuevas sin ningún motivo.
Las nuevas prácticas van dirigidas a ‘expulsar’ al cliente de la oficina bancaria, castigando a base de comisiones absurdas a los usuarios que, muchas veces personas mayores, no disponen de banca ‘online’ o no utilizan tarjetas.
Así, el Santander cobra 10 euros por añadir el nombre del remitente o el concepto en una transferencia que se haga en ventanilla. Incluso el simple hecho de hacer una transferencia a un tercero en nuestra propia sucursal está penado por casi toda la banca: Bankia e Ibercaja (3,50 €), CaixaBank y Popular (3,95 €), BBVA (4 €).
El Popular, que ha duplicado el mantenimiento en cuenta (de 60 a 120 €), llega a quitar al usuario 1 € por solicitar en ventanilla un traspaso entre sus propias cuentas.
Ibercaja cobra 6,01 euros en concepto de conformidad, es decir, solo por el hecho de que nuestra sucursal telefonee a otra del mismo grupo para autorizar una operación. Si solicitamos a esta entidad un dato pasado de nuestra cuenta puede costarnos de 6 euros (entre 0 y 5 años de antigüedad) a 18 euros (más de 30 años).