Ante el anuncio de nuevos acuerdos sobre las comisiones por retirada de efectivo en cajeros automáticos, la asociación de consumidores ADICAE seguirá vigilando que las nuevas tarifas se mantengan en unos precios razonables y proporcionados al coste real de la operación y no vuelvan a desvirtuar un mercado básico para los consumidores.
ADICAE espera que los costes que fijen los bancos propietarios de cajeros a entidades ajenas a estas nuevas alianzas, así como los importes que establezcan el resto de bancos, sean justos y garanticen el buen funcionamiento del sistema, amenazado durante meses por la doble comisión de 2 euros de CaixaBank.
De hecho, según ha detectado ADICAE, CaixaBank ya comunica en la pantalla de sus cajeros que cargará 2 euros, una cantidad «desorbitada» y para la que «no hay justificación», según defiende ADICAE y ha ratificado el actual Gobierno.
Así, los terminales de La Caixa informan de que «en los reintegros que se realicen a partir de la adaptación a la nueva norma, CaixaBank cobrará dos euros a su entidad», cantidad a la que el Santander tampoco renuncia.
Estos planes no solo contradicen al Ejecutivo, sino a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. La CNMC, cuyo papel supervisor ha reforzado el Real Decreto, ya ha instado a que las actuales y futuras comisiones deben responder al coste del servicio prestado, lo que obliga a los bancos a mantener la proporcionalidad tal como reclama ADICAE.
La presión ejercida por ADICAE ya consiguió tumbar la doble comisión de 2 euros de CaixaBank, obligando al Gobierno a aprobar un Real Decreto Ley para regular estas comisiones el pasado 2 de octubre.
La acción vigilante de ADICAE también logró que la banca se viera obligada a realizar por primera vez una devolución masiva y de oficio: la asociación denunció ante el Banco de España que las entidades emisoras de tarjetas estaban cargando a sus propios clientes costes añadidos a la comisión establecida por el dueño del terminal.