Con las movilizaciones celebradas el 14 de marzo en 15 ciudades españolas, que culminan mañana Domingo con la manifestación convocada en Madrid a las 12:00 horas, ADICAE lanza la campaña “el Poder de los Consumidores”, que a través de diferentes actuaciones en marzo pretende llamar la atención sobre el decisivo papel que los consumidores juegan en la salida de la crisis y sobre la necesidad de que las políticas públicas sean objeto de un giro para poder a los consumidores y usuarios en su punto de mira como colectivo clave en la economía, la sociedad y la política.
Las movilizaciones de hoy, al igual que la que mañana culminará este fin de semana de “protesta y propuesta consumerista” en Madrid, han reclamado cambios de fondo en el tratamiento y posición de los consumidores como colectivo partiendo de la realidad contrastada del abuso hipotecario y las cláusulas suelo, el fraude sistemático al ahorro familiar o el denominado como ‘atraco eléctrico’.
El éxito de las diferentes acciones llevadas a cabo en Barcelona, Zaragoza, Sevilla, Málaga, Granada, Cádiz, Santiago de Compostela, Valladolid, Cáceres, Alicante, Murcia, Las Palmas y Cantabria (a las 18:00 h), además de en localidades como Barbastro (Huesca) y Andorra (Teruel) ha puesto de manifiesto no sólo la indignación de los consumidores ante el abuso permanente al que se ven sometidos, sino la existencia de un germen creciente de reacción a esta situación.
De esta forma, a lo largo del fin de semana ADICAE está impulsando la conformación de grupos de acción que llevarán a cabo distintas actuaciones dentro de la campaña que bajo el nombre “el poder de los consumidores” mañana comenzará tras la finalización de la manifestación de Madrid, y de la que se darán algunos detalles en la misma.
Las denuncias y reivindicaciones de los consumidores en el Día del Consumidor
En el manifiesto que sirve de base a estas movilizaciones se denuncia la incapacidad de la justicia para resolver el creciente número de conflictos, abusos y fraudes masivos, a lo que se suma una situación de abuso constante y creciente sobre los consumidores en un sector como el de la energía, en el que las sucesivas reformas sólo han propiciado el beneficio de los grandes oligopolios mientras los precios suben hasta situar a España entre los países de la UE con la electricidad más cara. Esto acaba convirtiendo un bien básico como la luz en un lujo, según los convocantes, originando el fenómeno de la pobreza energética e incluso situaciones de “exclusión energética”.
El manifiesto también reclama el fin de una dinámica que descarga en los consumidores gran parte de los costes, directos e indirectos, de esta crisis y sus reformas, por lo que reivindica políticas alternativas que permitan avanzar hacia cambios reales de fondo que tengan a los consumidores como objetivo.
Finalmente el manifiesto reclama acabar con la impunidad de una banca que generó y desató la crisis y que ha sido responsable de múltiples casos de fraude masivo a los consumidores, reivindicándose la devolución de los ahorros defraudados, una justicia ágil y eficaz para los consumidores que favorezca las acciones colectivas previstas en la legislación, una reforma profunda del mercado eléctrico y cambios en la injusta legislación hipotecaria, entre otros aspectos