Una vez más el ‘modus operandi’ de la banca española en la colocación masiva y fraudulenta de productos tóxicos de ahorro para los consumidores, como participaciones preferentes o deuda subordinada, ha quedado destapado en los juzgados. En esta ocasión ha sido la juez del juzgado de 1ª instancia número 4 de Oviedo la que ha dado un sonoro ‘bofetón’ a la banca, concretamente a Caja España, ahora Banco CEISS.
ADICAE ha conseguido que este juzgado condene a la entidad a anular los contratos de dos series de participaciones preferentes y de unas obligaciones subordinadas que Caja España colocó entre 2004 y 2009 a E.L y M.A, ahorradores de a pie de toda la vida. Banco CEISS deberá devolverles 93.000 euros, más intereses. Y además pagará las costas judiciales.
Cuando los afectados se dieron cuenta de que los productos que tenían contratados no eran depósitos sin riesgo, y que no podían recuperar sus ahorros, entraron a formar parte de la Plataforma de Afectados por Participaciones Preferentes y otros productos tóxicos de ADICAE e iniciaron las gestiones para recuperar sus ahorros. La colocación de estos productos sigue el método que ADICAE siempre ha denunciado: venta masiva y con deficiente información a clientes con gran confianza en la entidad, pequeños ahorradores sin conocimientos financieros. Así, se los colocó M.J.F, con la que E.L tenía gran confianza, pues “siempre le atendía”.
En su defensa Banco CEISS se amparó en el artículo 1265 del Código Civil, indicando que el posible fraude ya había prescrito al haber pasado más de cuatro años desde la formalización de los contratos. Pero el artículo 1301 de dicho Código indica que este tiempo empezará a correr en los casos “de error, o dolo, o falsedad de la causa, desde la consumación del contrato”. La jueza considera que el canje por ‘CoCos’ -otro producto tóxico para los ahorradores- de mayo de 2013, al que los afectados acudieron por obligación del FROB, no extingue los contratos ya que “siguen generando obligaciones para los afectados”.
Deplorable información por parte del banco
No hubo información precontractual por escrito, sólo verbal por parte de la comercial del banco y esta “no fue completa, suficiente ni clara”, se indica en la sentencia. Además la empleada reconoció en el juicio que solo contemplaba como único riesgo “la quiebra de la entidad, algo entonces impensable”. Pero en 2011 Caja España se vio obligada a fusionarse con Caja Duero, para dar forma al actual Banco CEISS…
Caja España no estudió el perfil inversor de los afectados, y no concedía importancia al test de conveniencia: “era un mero trámite”, reconoce la comercial. Además en los dos tests de convieniencia realizados se han detectado contradicciones. En uno, E.L tenía estudios básicos y en el otro superiores; se indicaba que había contratado antes obligaciones subordinadas, cuando era la primera vez que lo hacía… y ni siquiera se refleja el resultado sobre la conveniencia o no de estos productos para E.L y M.A.
Además la entidad no entregó los folletos explicativos de los riesgos de las preferentes y subordinadas, algo que sí aportó en el juicio… pero sin firmar por los afectados. Y en las órdenes de compra ni siquiera aparecen los nombres completos de los productos, tan solo ‘Part. C. España Serie I’ u ‘Obl. C. España 08. Jul’, por lo que es imposible que los afectados descubriesen que en lugar de depósitos habían contratado participaciones preferentes y obligaciones subordinadas.
En definitiva, tal y como se indica en la sentencia, “no ha quedado probado que los demandantes tuvieran, por su formación o por su experiencia, un perfecto conocimiento de las características de las participaciones preferentes ni de las obligaciones subordinadas que les ofertó el banco. Sin embargo, sí ha resultado demostrado que la entidad bancaria no cumplió correctamente su deber legal de informar a los clientes”.
Más de 47 millones recuperados
Más de dos años después del estallido del fraude de la comercialización masiva e indebida de participaciones preferentes, deuda subordinada y otros productos tóxicos, cientos de afectados ya siguen recuperando sus ahorros. La presión social colectiva ejercida y las mediaciones extrajudiciales realizadas por ADICAE, incluidas las orientaciones para enfocar el sesgado Arbitraje ofrecido por la banca, están dando sus frutos.
ADICAE sigue realizando una intensa labor de mediación y orientación de cara a los sesgados arbitrajes que algunas de las entidades inmersas en este bochornoso fraude siguen llevando a cabo. Desde que comenzó este trabajo, 1.614 afectados han llegado a acuerdos satisfactorios con sus bancos para recuperar sus ahorros: 699 de Caja Madrid, 415 de Bancaja, 193 de Caixa Catalunya, 88 de Caixa Galicia, 62 de Caixa Laietana, 55 de Caja España – Caja Duero, 48 de Caixa Nova, 19 de Caja Rioja, 16 de Caja Segovia, 13 de Caja Canarias y 6 de Caja Ávila. La media de los ahorros depositados por los afectados ronda los 30.000 euros. Estas cantidades recuperadas, unidas a las sentencias favorables que acumula ADICAE, hacen que la banca tenga que devolver, por ahora, 47.243.378,9 euros.