Los bonos de Audasa, concesionaria de la autopista de peaje entre El Ferrol y la frontera portuguesa, ofrecen más rentabilidad que los depósitos bancarios, y lo logran gracias a sus ventajas fiscales. Gracias a la Ley de 10 de mayo de 1972 sobre construcción, conservación y explotación de autopistas en régimen de concesión, este tipo de sociedades mantienen beneficios tributarios que hacen que a los ahorradores que coloquen aquí su dinero solo se les retenga el 1,2% de lo obtenido por los intereses, en lugar del 21% habitual. A esto se une que los bonistas se podrán deducir en la declaración del IRPF el 24% de los intereses. Esto hace que, aunque el interés nominal sea del 4,75%, la rentabiliadd financiero-fiscal alcance el 6,12% (para tipo impositivo del 21%), el 6,19% (para el 25%) y el 6,13% (para el 27%). Los intereses se abonarán de forma anual.
En total se van a emitir 195,8 millones de euros en bonos, aunque se prevé una posible ampliación hasta los 400 millones. La inversión mínima es de 500 euros, que es el valor de cada bono. El objetivo de esta emisión es cubrir el vencimiento de otra emisión de obligaciones que se realizó en 2004. Algunas entidades en las que pueden comprarse los bonos son, entre otras, Deutsche Bank, CaixaBank, Bankinter, Bankia y Banco Popular, y el periodo de compra de bonos va del 3 al 26 de marzo. Si se realiza a través de las entidades aseguradoras y colocadoras que comtempla el folleto de la oferta registrado en la CNMV, la operación de suscripción no está sujeta a ninguna comisión.
Esta operación de emisión de bonos cotizará en el mercado AIAF de renta fija, en la plataforma SEND (Sistema Electrónico de Negociación de la Deuda). El AIAF es el mercado español de referencia para la Deuda Corporativa o renta fija privada integrado en Bolsas y Mercados Españoles (BME), la compañía que opera los mercados financieros españoles. Esto quiere decir que los bonos de Audasa cotizan en un mercado regulado, sometido al control de las autoridades en cuanto a su funcionamiento y en materia de admisión a cotización de valores y difusión de la información. La emisión actual cuenta con además con la garantía solidaria de Ena Infraestructuras, empresa concesionaria de autopistas filial del grupo Itínere, el mismo al que pertence Audasa.
Un producto con riesgos para el ahorrador
A pesar de estas ‘garantías adicionales’ y de un interés más atractivo que el de los depósitos, no hay que perder de vista que estos bonos son un producto con riesgo para los consumidores. Es muy importante recordar que este tipo de emisiones no cuentan el resplado del Fondo de Garantía de Depósitos, que cubre los depósitos bancarios con hasta 100.000 euros por titular. Por eso, en caso de que Audasa se declarara insolvente, el ahorrador que hubiera invertido en estos bonos podría perder todo su dinero. A esto hay que añadir que se trata de una inversión a largo plazo, seis años, y aunque el cobro de intereses es anual, la cantidad invertida no se podrá recuperar hasta que se acabe el plazo.