El Euribor cerraba este mes de agosto en un 2,097%, lo que supone la primera bajada desde julio de 2009. Sin embargo, si lo comparamos con el Euribor de hace un año (agosto de 2010) veremos que, en los últimos doce meses, se ha incrementado en 0,676 puntos, lo que supondrá un aumento considerable de las cuotas hipotecarias para quienes tengan que revisarlas este mes. Pueden hacer un cálculo de cómo les afecta la subida el Euribor usando nuestro simulador hipotecario.
Por ejemplo, para un préstamo hipotecario de 150.000 euros a 30 años, la subida supondría pasar de una cuota mensual de 511,36€ a otra de 560,23€ (teniendo en cuenta solo el Euribor, sin sumarle los diferenciales), lo que supondría pagar 586,44 euros más a final de año. Una subida considerable que pondrá en una situación aún más complicada a los hipotecados, especialmente a aquellos que se hallan en riesgo inminente de embargo.
No obstante, hay que tener en cuenta que existen casi un millón de préstamos hipotecarios a los que las entidades financieras ya aplicaron su particular subida de tipos y no han podido beneficiarse de la bajada del Euribor, debido a la inclusión de cláusulas suelo en sus hipotecas. ADICAE ya ha demandado a más de 100 entidades por este motivo.
El Banco Central Europeo podría ayudar bajando los tipos de interés
Una bajada de los tipos de interés, por parte del Banco Central Europeo, al 1% podría ayudar a las familias además de a los países más necesitados económicamente. Si esta bajada de tipos se produjera, habría que idear medidas para trasladarla de forma inmediata a las hipotecas. Es necesario, además, hacer un llamamiento al Banco Central Europeo y al Gobierno español para que no se dejen avasallar por los intereses de Francia y Alemania.
En todo caso, para aliviar la situación del alrededor de un millón de familias hipotecadas se hace cada vez más necesaria la aprobación de una moratoria hipotecaria ya, tal como la que ADICAE propuso hace unos días a los grupos parlamentarios. Además, ADICAE hace también un llamamiento a los consumidores hipotecados para que acudan a su entidad a revisar los diferenciales.