Del atraco eléctrico, las hipotecas y las preferentes hacia un nuevo modelo de consumo. El 14 de marzo, víspera del Día Mundial de los Derechos de los Consumidores, ADICAE convoca movilizaciones para expresar su preocupación e indignación por el panorama político, económico y social que afrontan los consumidores. La asociación hace un llamamiento a todas las organizaciones sociales a secundar esta jornada de lucha.
Un panorama en el que se descargan en los ciudadanos todos los costes de esta crisis y de las reformas; en el que la impunidad de grandes sectores como la banca o la energía se convierte en caldo de cultivo para el abuso continuado; en el que la ley sólo maquilla (en el mejor de los casos) los problemas pero no da respuesta a los mismos; y en el que la Justicia es incapaz de solucionar el creciente número de conflictos, abusos y fraudes masivos.
Un panorama en el que todas las medidas se orientan a la vuelta al consumismo desaforado, individualista y dañino para los ciudadanos y para una economía social y sostenible; en el que la supuesta búsqueda de un nuevo modelo productivo olvida el necesario cambio del modelo de consumo, y en el que se pretende volver a las políticas y prácticas que nos llevaron a esta crisis, para que todo siga igual.
Las cifras son escandalosas: 570.000 ejecuciones hipotecarias, 4 millones de familias pagando abusivas “cláusulas suelo”, 1 millón de familias afectadas por las participaciones preferentes y otros productos de ahorro tóxicos, decenas de miles de desahucios y medio millón de familias afectadas por los casos Fórum Filatélico, Afinsa y Arte y Naturaleza que lleva 9 años sin juicio ni solución.
Se suma el abuso constante en un sector como la energía, donde las sucesivas reformas sólo han propiciado el beneficio de los grandes oligopolios mientras el precio sube hasta situar a España entre los países de la Unión Europea con la electricidad más cara y se genera la “pobreza energética” sin medidas de corrección, convirtiendo un servicio básico como la luz en un lujo. Mientras, las eléctricas gozan de una impunidad y poder proveniente de las “puertas giratorias” con el poder político, que legisla un modelo energético al dictado de sus intereses.
Al tiempo las instituciones políticas europeas actúan de espaldas a la ciudadanía, siendo ejemplo de ello el Tratado de Libre Comercio, TTIP, sin duda un tratado lesivo y peligroso para los consumidores.
Como consecuencia de todo las familias, los ciudadanos, los trabajadores, consumidores todos ellos, no sólo han perdido poder adquisitivo sino derechos, ahondando aún más en la crisis y en la agónica recuperación de años con la que nos amenazan.
Los consumidores reclamamos
Poner fin a la dinámica de descargar en los consumidores y usuarios todos los costes de esta crisis y de todas las reformas. Son necesarias medidas políticas alternativas que permitan avanzar hacia cambios reales de fondo.
Acabar con la impunidad de la banca que extiende sus tentáculos de lobby en las instituciones públicas y la Justicia, y en ese camino los procesos penales han de dar con los responsables de la crisis y de los fraudes en la cárcel.
Las reformas no pueden ser a medida de los culpables de la crisis; hay que reformar en profundidad la injusta legislación hipotecaria y aprobar una moratoria hipotecaria paralizando las ejecuciones y embargos, un verdadero mecanismo de “segunda oportunidad” -y no un mero ‘traslado de deudas’ como el aprobado por el Gobierno- frente al endeudamiento perpetuo y acabar con las abusivas cláusulas suelo, que abocan a miles de familias al impago y al desahucio.
Una Justicia rápida, gratuita y eficaz para los consumidores, favoreciendo las acciones colectivas y la garantía de una Justicia universal.
Una reforma profunda del mercado eléctrico que cuente con los consumidores, y que garantice el suministro a un precio justo para todas las familias como un servicio básico garantizado. También queremos acabar con la impunidad de las eléctricas, exigiendo una auditoría del déficit de tarifa y la devolución de los 3.400 millones de euros provenientes de los Costes de Transición a la Competencia.
La retirada inmediata del proyecto de TTIP y que no vuelva a negociarse de espaldas a los consumidores.
La recuperación del 100% de los ahorros defraudados por los bancos a todos los afectados por las participaciones preferentes, deuda subordinada y otros productos tóxicos de ahorro, y una solución política para la recuperación de los ahorros a los afectados de Fórum Filatélico, Afinsa, Arte y Naturaleza y justicia tras casi 9 años sin solución. El ahorro popular no puede ser la caja a la que meter mano cada vez que hay que sanear un sector corrupto.
Una nueva banca y un sistema financiero que cuente en su diseño con la ciudadanía y los derechos de los consumidores, transparente, democrático, justo y solidario.
Estamos en el inicio de un nuevo camino; el de los consumidores organizados para exigir el cambio y la reforma de un sistema financiero y oligopolios como el energético privilegiados, ultraprotegidos y cuyo negocio se centra en el expolio a millones de familias.
Por todos estos motivos, y los tuyos propios, el 14 de marzo te esperamos en las calles.