El fin del roaming llega tras la multitud de denuncias y demandas que ADICAE y otros colectivos de defensa de consumidores llevan realizando durante años ante las instituciones de la Unión Europea. La medida supondrá un ahorro notable a los usuarios que pasan de pagar un extra de casi 2 euros a limitarse al gasto que le corresponda por la tarifa de datos contratada en su país de residencia.
La batalla contra las empresas de telecomunicaciones en el sector europeo para acabar con los abusos ha sido ardua ya que se ha encontrado con la oposición férrea de más de 40 grandes compañías telefónicas de toda Europa -algunas muy poderosas, pues eran antiguos monopolios estatales, como ocurre en España con Telefónica-. La medida para estas empresas, acostumbradas a controlar el mercado, podría suponer a medio plazo la competición en un mercado único europeo que facilitaría a los consumidores a acceder a una mayor y mejor oferta, lo que repercutiría en sus abultados beneficios.
La Comisión Europea ya ha advertido que vigilará cualquier propensión a alzar las tarifas nacionales de servicio de telefonía móvil tras la abolición del roaming. El vicepresidente del Ejecutivo comunitario para el Mercado Único Digital, Andrus Ansip, ya advirtió tras el anunció de estas posibles maniobras y remarcó que tanto los reguladores nacionales como la CE tienen que abordar esos asuntos muy seriamente.
ADICAE, en su compromiso por defender los derechos del consumidores, ya denunció en la última Junta de accionistas de Telefónica – en la que participa en representación de más de 5 millones de pequeños accionistas- las desmedidas subidas unilaterales de los precios de sus servicios, como la aplicada el pasado abril al paquete Fusión. Desde mayo de 2015, Movistar ha subido cuatro veces el precio de su oferta convergente (telefonía fija, móvil, internet y televisión). Como consecuencia de ello, el paquete estrella, Fusión, cuesta hoy 18 euros más al mes que entonces.
Otra de las compañías que ha modificado al alza su oferta es Orange, que en noviembre de 2016 modificó toda su oferta y apenas dos meses después, subió entre dos y cinco euros mensuales algunas modalidades.
Por su parte Vodafone aumentó recientemente entre tres y cinco euros el paquete One, para los clientes nuevos y actuales, sin dar margen alguno a estos últimos de mantener sus condiciones. Además la operadora ha incurrido en flagrantes abusos como el cobro de 2,5 euros por por atender gestiones telefónicas básicas. Ante este evidente abuso, ADICAE prepara medidas para resarcir a los usuarios afectados.
ADICAE se mantiene alerta y seguirá denunciando cada movimiento abusivo de las teleoperadoras ante el peligro de que la retirada del roaming suponga una la alteración al alza de las tarifas como respuesta a la disminución de sus beneficios.