Los seguros multirriesgos (que agrupan varias coberturas –diferentes riesgos incluidos- en uno solo), como los de hogar, son los que más reclamaciones generan por parte de los consumidores, según datos de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones correspondientes al primer trimestre de 2011. De hecho, una de cada tres reclamaciones por seguros, corresponden a los seguros relativos a incendios, elementos naturales y otros daños a los bienes, que suelen estar incluidos dentro de los seguros de hogar.
El de hogar es, además, uno de los seguros más habituales entre los consumidores y su contratación va en aumento puesto que incluyen el seguro contra incendios que es imprescindible para la firma de los préstamos hipotecarios. No obstante, dado que engloba diversas coberturas y los hay de diferentes tipos, es cada vez más importante informarse detalladamente antes de contratarlo y decidirse por un seguro de hogar u otro.
Es imprescindible saber qué es lo que necesitamos asegurar
Para empezar, hay que tener claro qué es lo que necesitamos asegurar para no duplicar coberturas ni pagar extras que no nos hacen falta. Generalmente, las comunidades de vecinos tendrán su propio seguro de daños. Si bien éste cubrirá habitualmente solo las zonas de uso común, no está de más asegurarnos para no pagar dos veces por lo mismo. Antes de contratar su seguro de hogar, pregunte en su comunidad qué riesgos cubre el seguro de la misma.
Hay que prestar también especial atención a los seguros “a la carta” (que nos permiten elegir qué riesgos cubrir en nuestra póliza y cuáles no) puesto que, en ocasiones, pese a eliminar parte de las coberturas que sí incluye el seguro completo, su coste es prácticamente el mismo. Así, hay que asegurarse de que efectivamente estamos pagando solo por lo contratado y que efectivamente nos ha sido descontado el coste de las coberturas eliminadas.
Principales problemas en la contratación de seguros de hogar
Según la Memoria 2010 de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones, las principales reclamaciones sobre seguros de hogar se refieren a discrepancias en la valoración del siniestro que afectan al consumidor (sobre todo, cuando hay controversia entre dos aseguradoras distintas, la de la comunidad y la de la vivienda, y ambas niegan la cobertura), la reparación de siniestros por operarios de la compañía, la falta de información e inadecuado asesoramiento antes de la contratación del seguro y la falta de información sobre las causas de no cobertura.
Si tenemos en cuenta las reclamaciones respecto a estos seguros en el primer trimestre de este año, veremos que tres de cada cuatro (71,76%) corresponden a divergencias en la aplicación e interpretación de la póliza contratada. Es decir, es de vital importancia que el consumidor se asegure de recibir información completa previa a la contratación del seguro, y que resuelva todas las posibles dudas de interpretación que puedan surgirle al respecto, a ser posible por escrito, para evitar problemas posteriores.
Qué tendrán en cuenta para determinar la cuantía a pagar ]
Conocer qué es lo que influye en la determinación de la prima del seguro (la cuantía que deberemos pagar para estar cubiertos) es también de vital importancia. Entre otros aspectos, influye si la vivienda ha sido construida con materiales incombustibles, si se encuentra en un núcleo de población con 50 o más viviendas, si permanece bastantes días al año deshabitada o nadie pasa la noche en ella, el tipo de vivienda, si la tenemos en propiedad o en alquiler, la antigüedad del edificio, etcétera.
Pero, por encima de todo, influirán las cantidades que queramos asegurar, tanto en lo que respecta al continente (todas las partes del edificio que les son propias, es decir, todo aquello que no se puede trasladar a otro sitio) como en lo referente al contenido (lo que se halla dentro de la vivienda pero no es inherente a ella, sino que puede moverse a otro lugar). En general, la valoración de ambos es bastante subjetiva. A este respecto, hay que tener en cuenta que cuanto menor sea el valor en que se ha tasado el contenido de una vivienda, lo que abaratará el seguro, menor será la cantidad a reclamar a la aseguradora en caso de siniestro.
Qué nos ofrecen las aseguradoras
Casi todos los seguros de hogar que se ofrecen actualmente en nuestro país tienen coberturas similares (incendios, tuberías, robos…), si bien es común también que cada aseguradora ofrezca varios tipos de pólizas diferentes: unas más básicas, otras más complejas, pasando por las llamadas “pólizas a la carta”. ADICAE ha analizado algunos seguros de hogar para que el usuario pueda comparar precios y descubra las características de estos.
Hemos encontrado, así, además de las tradicionales, coberturas relativamente actuales como son las de asistencia informática, uso fraudulento de la tarjeta de crédito (los primeros 150€ están ya cubiertos por ley en cualquier caso) o impago de alquileres; al tiempo que se ofrecen servicios novedosos como la contratación vía Smartphone (teléfonos de última generación) o regalos, como estaciones meteorólogicas o miniextintores. ¡No se deje deslumbrar por estos detalles anecdóticos y fíjese en el precio! Estos pequeños añadidos no le serán útiles en la mayoría de los casos pero, si se deja llevar por ellos, puede acabar pagando de más.
Las primas a pagar varían de una compañía a otra. Así, para una vivienda cuyo continente está valorado en 70.000€ y su contenido en 15.000€, encontramos primas entre 89,30€ y 236,80€ dependiendo del tipo de cobertura (básica o completa) contratada. Además, la última moda es ofrecer descuentos, especialmente si se tienen otras pólizas contratadas con la misma compañía, aunque también los hay que los ofrecen al contratar el seguro por Internet, por ejemplo.
En todo caso, hay que tener en cuenta que no todas las compañías nos ofrecen la misma cobertura por responsabilidad civil (ni en cantidad ni en casos cubiertos, ya que algunas nos cobrarán un plus si queremos añadir la responsabilidad civil por perros de raza peligrosa o por la práctica de la caza) y que algunas establecen mínimos para el contenido que se cubre que son superiores a los 15.000€ que hemos considerado… Así las cosas, es muy importante comparar lo que nos ofrecen con lo que necesitamos para tomar la decisión basándonos en los precio a pagar por lo que efectivamente queremos contratar.