Las comisiones bancarias siguen desgastando la economía familiar ante la pasividad del Banco de España, el Ministerio de Economía y la Comisión Nacional de la Competencia. Por mucho que oigamos eso de que “la crisis la pagamos todos”, quienes la originaron (las entidades financieras) parecen desentenderse del asunto e intentar cargársela a los consumidores, ya no solo a través de cláusulas abusivas (como los suelos hipotecarios) y productos tóxicos (como los swaps), sino también incrementando las comisiones.
Así, desde que la crisis se iniciara hace ya cuatro años, la subida de las comisiones bancarias (y especialmente de las más habituales: mantenimiento, tarjetas, transferencias…) ha sido escandalosa, completamente abusiva, si consultamos los datos recogidos por el Banco de España. Las cifras venían ya incrementándose en 2006 y, desde 2009, han tomado especial velocidad, tal como ha venido anunciando ADICAE.
[Titular_cuadro]Cuatro años de subidas escandalosas[/Titular_cuadro]Tipo de comisión 31/07/07 31/07/11 Variación
Mantenimiento de cuentas corrientes 18’84 euros 25’80 euros 36’94%
Mantenimiento de cuentas de ahorro 18’00 euros 25’16 euros 39’77%
Transferencias nacionales 3’01 euros 4’26 euros 41’52%
Cuota anual de la tarjeta de crédito 28’43 euros 36’93 euros 29’89%
Cuota anual de la tarjeta de débito 13’57 euros 19’89 euros 46’57%
Tarjeta de débito:
disposición en cajeros propia red 0’60 euros 0’96 euros 60’00%
Estudio de crédito no hipotecario 79’07 euros 103’46 euros 30’84%
Apertura de crédito hipotecario 551’94 euros 662’75 euros 20’07%
Estudio de crédito hipotecario 89’20 euros 132’48 euros 48’52%
Cancelación anticipada
crédito hipotecario 3’88% 4’07% 4’89%
Fuente: Tabla de tarifas máximas, mínimas y medias del Banco de España
Llama la atención que la mayor parte de las comisiones más comunes han aumentado, como mínimo, un 30%, llegando en algunos casos hasta el 60% (como al sacar dinero en cajeros de otro banco de la propia red con tarjeta de débito). Pero, además, queremos destacar la de cancelación de crédito hipotecario, cuyo incremento puede parecer más comedido, pero que es una comisión sobre importe… lo que se traduce al final varios cientos de euros en cada operación.
Y todo esto pese a que las entidades financieras han ido disminuyendo progresivamente su número de oficinas, lo cual entendemos que es necesario para reducir sus gastos, pero también repercute en los consumidores, ya que reduce el tiempo de atención al cliente y aumenta considerablemente el tiempo de espera. A esto hay que sumar, además, la cada vez mayor presencia del “autoservicio”, que los consumidores realizan por sí mismos sobre todo a partir de las páginas web de las entidades financieras, que por otro lado continúan siendo confusas y un mero escaparate y piden a gritos una mejora en su seguridad. Entonces, ¿por qué tenemos que pagar más por un servicio de peor calidad? ¿No debería ser al revés? ¿También van a cobrarnos comisiones por las operaciones que hacemos nosotros mismos?
Una vez más, se hace evidente la necesidad urgente de cambios que defiendan a los consumidores ante los continuos abusos de la Banca. El Banco de España, el Ministerio de Economía y la Comisión Nacional de Competencia deben tomar cartas en el asunto, inmediatamente. El aumento simultáneo de todas las comisiones en todas las entidades financieras, junto al mayor pago por peores servicios, constituye una nueva muestra del fracaso de la “libre competencia bancaria”. Nunca la hubo de verdad y, ahora, menos.
Las dos armas principales con que contamos para evitar estos atropellos son la información y la presión social y negociadora, a través de reivindicaciones sociales masivas, coordinadas y sostenidas en el tiempo. Por ello, ADICAE invita a todos los consumidores a acudir a sus sedes para revisar sus recibos bancarios en busca de abusos, y a salir a la calle a defender sus derechos. ¡No toleremos que bancos y cajas nos hagan pagar una crisis que ellos mismos han provocado con su mala gestión!