Los seguros de coche ya no son lo que eran. La crisis ha hecho que se incremente la competencia entre las compañías, un fenómeno acentuado por la proliferación de comparadores en Internet – una herramienta que puede orientar, pero que no puede sustituir a un comprobación detallada por parte del consumidor de los precios y condiciones reales-. En este contexto, se ha producido un ligero abaratamiento de las pólizas de las principales compañías, con un descenso 7,5% acumulado desde 2011, según datos del Índice de Precios del Seguro, aunque en 2013 (datos hasta septiembre) esta evolución se frenó y la rebaja fue solo del 0,5%.
Para aquellos que ya tienen seguro y llega el momento de renovarlo, es una oportunidad para estudiar las distintas ofertas del mercado y comprobar si hay margen para el ahorro. Un reciente análisis realizado por un comparador web concluía que la media de ahorro entre la prima de un seguro varios años renovado y la mejor oferta para un producto similar era de 220 euros. En los extremos, el ahorro puede ir desde los 60 euros para un seguro a terceros (incluídas lunas) sin bonificación máxima a más de 800 euros en un seguro a todo riesgo en el que se haya dado parte de siniestros.
Bonificaciones vs. Nuevas ofertas
Una de las razones por las que cambiarse aseguradora puede salir a cuenta es que las bonificaciones que ofrecen las compañías a los conductores que no han dado partes suelen ser mucho menos ventajosas que las ofertas que se hacen a nuevos clientes. Los consumidores pueden sacar partido de esto cuando su contrato de seguro vaya a expirar, y tratar de buscar un producto que le ofrezca las mismas coberturas a mejor precio. A la hora de contratar un nuevo seguro, es importante estudiar las condiciones tanto para certificar que efectivamente ofrece la cobertura deseada como para comprobar cuál puede ser la evolución de las primas según nuestro perfil de conductores.
Si algunas cifras muestran una tendencia que puede ir a favor de los consumidores, otras ofrecen el reverso negativo. Así, según los últimos datos recogidos en el informe de la patronal del seguro UNESPA, la tasa de reclamaciones por seguros de vehículos en la Dirección General de Seguros pasó de 2007 de 3,6 por cada 100.000 siniestros a 5,8 en 2011. Asimismo, en 2011, los seguros de coche ocupaban el puesto 11 entre los 50 conceptos de gasto de los hogares españoles, lo que da idea del peso que este tipo de producto puede llegar a ocupar en la economía de los consumidores. Por eso, ante cualquier problema con su seguro de coche, los consumidores deben hacer valer sus derechos y exigir que sus aseguradoras cumplan lo establecido sin poner obstáculos. En su sede más cercana de ADICAE encontrará ayuda para reclamar.
